El analizador de gases por infrarrojos utiliza rayos infrarrojos para el análisis de gases. Se basa en las diferentes concentraciones de los componentes a analizar y en la diferente energía radiante absorbida. La energía radiante restante provoca diferentes aumentos de temperatura en el detector y diferentes presiones en ambos lados de la película en movimiento, generando así una señal eléctrica de un detector capacitivo. De esta manera se puede medir indirectamente la concentración del componente a analizar.