En la actualidad, la epidemia en nuestro país está básicamente bajo control. Si hay inmigrantes de otros lugares, el riesgo de esta infección puede aumentar. Así que ahora es una gran prueba para todos, incluso cuando estaba en la escuela, el maestro era una gran prueba. Ante esta situación, debemos tomarla en serio. Sólo así podrá mantenerse mejor en un estado relativamente bueno.
Por ello, el inicio del curso escolar se ha convertido en una gran prueba para cualquier ciudad o provincia. El número de estudiantes es grande, la concentración es grande y la movilidad es relativamente alta. Por tanto, nadie puede garantizar esta situación y esperamos que este período de tiempo pase lo antes posible, para que se pueda controlar la epidemia y los niños puedan ir a la escuela lo antes posible. Si su escuela no tiene medidas particularmente buenas, o incluso no puede garantizar la seguridad de los estudiantes mientras están en la escuela, entonces será mejor que no espere hasta que comiencen las clases. Los estudiantes son el futuro de la patria y la esperanza de cada familia. Es mejor no abrir escuelas hasta que se tomen medidas completas para garantizarlo.
Ante esta epidemia, docentes, estudiantes y padres deben tomar precauciones, cuidar bien a sus hijos en casa, lavarse las manos frecuentemente y revisar sus tareas. Cuando comiencen las clases, naturalmente irán. Antes de que comiencen las clases, también necesitan hacer algunos preparativos psicológicos para sus hijos. Ahora el momento es incierto, lo que significa mayores riesgos. Algunos estudiantes vienen de todas partes y tienen que esperar un rato.