Yo pondría el puenting como buen ejemplo. Habrá una cuerda elástica atada a tu tobillo a más de 200 metros del lugar donde saltas (tal vez un puente o un globo aerostático). La velocidad máxima es de 150 kilómetros por hora hasta que dejas de tirar de la cuerda. Se dice que alrededor de 2 millones de personas en todo el mundo han probado el puenting u otras actividades similares. La mayoría de la gente diría que saltar desde lo alto de un acantilado o al océano es peligroso.
¿Por qué la gente participa en este tipo de actividades? Algunos psicólogos señalan que esto se debe a que la vida en la sociedad moderna se ha vuelto muy segura y aburrida. No hace mucho, las enfermedades eran difíciles de curar y la vida era una batalla constante por sobrevivir.
Hoy en día, muchas personas viven y trabajan en un entorno relativamente seguro. Compran comida en las tiendas para cuidarse. Si se enferman, hay médicos y hospitales. ¿Cómo puede ser emocionante la vida sin un latido del corazón? La respuesta para algunos es buscar actividades peligrosas como el puenting.
Las anteriores son opiniones puramente personales y sirven únicamente como referencia.