Su apariencia no siempre es la de un ángel.
A veces es un buitre chillón, un elefante imprudente, un jabalí descuidado, un dragón que escupe fuego...
Luego se convirtió en un extraño hombrecito salvaje con pelo por todo el cuerpo, y se volvía más y más extraño.
Hasta que un día se convirtió en un joven educado.
Pero los padres se convirtieron en una pareja de viejos pelícanos llamados por Caracalla.
La vida es tan hermosa, ¿no?
Una vez fuimos los pequeños monstruos de nuestros padres y con el tiempo nos convertiremos en los viejos pelícanos convocados por Caracalla.
Pero ¿por qué lo llamas Viejo Pelícano? en lugar de otros animales.