Las monedas son particularmente susceptibles a oxidarse cuando se exponen a la humedad, por lo que deben almacenarse en un lugar seco. Por lo tanto, es mejor poner las monedas en una caja sellada, como una caja de hierro para galletas, para evitar que entren al aire, a menos que existan circunstancias especiales, no la abra fácilmente.
Un método para eliminar el óxido de las monedas
1. Método de calentamiento
Este método se utiliza principalmente para monedas de hierro con corrosión superficial. El componente principal del óxido es el óxido de hierro ferroso, que tiene una estructura molecular suelta y se absorbe con mucha menos fuerza en las monedas de hierro que en las de cobre. Por lo tanto, al utilizar el principio de expansión y contracción térmica, algunas monedas de hierro pueden oxidarse.
2. Método de remojo en ácido
Lavar las monedas, ponerlas en un plato pequeño y verter vinagre hasta que las monedas queden sumergidas. Sácalo después de 4 horas, usa un cepillo pequeño para quitar el óxido restante, luego lávalo con agua y vinagre y sécalo a la sombra. Sin embargo, pueden aparecer marcas amarillas en la superficie de las monedas después de ser tratadas con vinagre, lo que afecta su apariencia.
3. Método de cepillado en seco
Cuando la pátina o el óxido son poco profundos, se deben utilizar medios químicos tanto como sea posible y se pueden utilizar métodos físicos para aclarar las líneas. El método específico es elegir un pincel grande para pintar al óleo. Primero, fije la moneda a pintar en la placa de vidrio, sostenga la raíz del pincel al óleo y cepille uniformemente. Tenga cuidado al aplicar fuerza, de lo contrario el efecto será deficiente, luego enjuague con agua limpia.