Las responsabilidades y misión de la policía penitenciaria

Las responsabilidades y misiones de la policía penitenciaria incluyen principalmente:

1. Los agentes de policía penitenciaria son los encargados de hacer cumplir la ley y son responsables de garantizar que los delincuentes cumplan con la ley y las normas y reglamentos penitenciarios.

2. Gestionar la prisión. La policía popular penitenciaria es responsable de la administración penitenciaria, incluida la custodia, liberación, conmutación, libertad condicional, etc. de los delincuentes, y al mismo tiempo garantiza la seguridad y el orden de la prisión.

3. Educación y reforma de los delincuentes. Mediante educación, asesoramiento psicológico y otros métodos, la policía penitenciaria ayuda a los delincuentes a comprender sus errores, corregir su comportamiento y prepararse para la reintegración en la sociedad.

4. Proteger los derechos e intereses de los delincuentes. La policía penitenciaria debe garantizar los derechos e intereses legítimos de los delincuentes durante su condena, como el derecho a la supervivencia y el derecho a apelar, y al mismo tiempo evitar abusos e insultos a los delincuentes.

5. Gestión financiera. La Policía Popular de Prisiones es responsable de la planificación, las finanzas, la auditoría, la construcción de capital y la gestión de activos de propiedad estatal de las prisiones.

6. Formación de equipos. La Policía Popular de Prisiones también es responsable de la formación de equipos de funcionarios y personal penitenciario, incluido el trabajo ideológico y político, la gestión de cuadros, la educación y la formación, etc.

7. Supervisión policial. La policía penitenciaria será responsable de supervisar la aplicación de la ley dentro de la prisión, garantizar la correcta implementación de la ley e investigar y manejar los casos de violaciones de las leyes y disciplinas.

8. Cumplir otras tareas asignadas por los superiores. La policía popular de prisiones debe realizar otras tareas asignadas por los departamentos superiores, incluidas, entre otras, la seguridad, la gestión de reclusos y otras tareas.

9. Como importante fuerza de aplicación de la ley penal en el país, la policía penitenciaria no se limita a castigar a los delincuentes, sino que, lo que es más importante, a través de la educación, la gestión y la supervisión, ayuda a los delincuentes a reformarse y contribuir a la sociedad. a la seguridad y la estabilidad.