Mi sueño, el sueño chino, una composición de Zhu Yifan de la escuela secundaria Wenfeng en la ciudad de Shishou

Cada uno tiene sus propios sueños y los lindos animalitos no son una excepción. Pero el sueño de cada uno es diferente. Algunas personas quieren convertirse en científicos con conocimientos. Algunas personas quieren ser inventores que beneficien a la humanidad; otras quieren ser policías del pueblo leal... También tengo un sueño simple y común: ser un maestro del pueblo.

Creo que la enseñanza es una profesión sagrada y noble; si somos flores, el maestro es el jardinero trabajador; si somos pájaros, el maestro es el cielo sin límites; El maestro es el vasto mar... Desde el primer día de clases, nos llevamos bien con los maestros todos los días y deambulamos por el mundo del conocimiento. Las enseñanzas del maestro nos nutren como la lluvia y el rocío, permitiendo que la flor del conocimiento florezca brillantemente en nuestros corazones.

Dos profesores de nuestra clase trabajaron duro durante un semestre y finalmente los estudiantes obtuvieron resultados fructíferos. En ese momento, el corazón del maestro se calentó, un sentimiento de orgullo surgió espontáneamente y se sintió feliz. En este momento siento que es genial ser profesora.

Creo que, para ser un maestro glorioso, puedes enseñar todo lo que has aprendido en tu vida en un podio de un metro; puedes ver a tus alumnos crecer felices todos los días. ¡Cuán feliz y deseable sería eso! Si algún día realmente me convierto en un maestro del pueblo. No importa quiénes sean los estudiantes, les dedicaré mi valor. Sin embargo, para convertirnos en un excelente maestro, creo que deberíamos empezar desde ahora y empezar con cada pequeño detalle. Desarrollar buenos hábitos de elegancia, amabilidad y tolerancia; en mi estudio y vida diarios, me exijo estrictamente y soy bueno para descubrir las fortalezas de los demás y aprender de las fortalezas de los demás. ¡Esté siempre preparado para luchar por la educación para toda la vida!

Sin sueños, una persona no tiene metas, no tiene motivación para seguir adelante, no tiene forma de ver el camino a seguir y no tiene un futuro brillante. Sin sueños, es como un pájaro sin alas, incapaz de volar libremente por el cielo. Tener sueños nos da esperanza para el futuro. Tener un sueño es la mitad de la batalla. Los sueños dependen de su firme convicción y perseverancia, y solo pueden realizarse a través del trabajo duro. Entonces, para hacer realidad este sueño, ¡trabajaré duro por mi sueño de ahora en adelante!