Los pasos para este tipo de gestión son los siguientes:
1. Determinar la naturaleza y el alcance del conflicto, y comprender las causas y los antecedentes del mismo.
2. Analizar todos los aspectos del conflicto, incluyendo la causa del conflicto, los participantes en el conflicto, el impacto del conflicto, etc. Se debe comprender plenamente a las personas involucradas en el conflicto, sus respectivos intereses, características humanas y situaciones de conflicto.
3. Con base en los resultados del análisis de conflictos, formular las soluciones correspondientes, incluido el cambio de métodos de comunicación, el ajuste de la estructura organizacional, la mejora de las habilidades personales, etc.
4. Poner en práctica las soluciones formuladas y emprender acciones específicas.