En los primeros días de la liberación, había una grave escasez de bienes en el mercado. Para garantizar las necesidades básicas de la población, el Estado decidió implementar una política unificada de compras y comercialización, es decir, emitir diversos billetes de productos y distribuirlos de forma planificada. Desde que se emitieron los primeros cupones de alimentos en 1955, los chinos han entrado en una larga "era de los billetes". Los cupones para alimentos, para el petróleo, para telas, para la carne, para el azúcar, para los productos de soja y para la industria se han convertido en la garantía básica para la vida de las personas.
Después de la Tercera Sesión Plenaria del XI Comité Central, con el desarrollo de la economía nacional, la oferta de productos básicos del mercado ha mejorado fundamentalmente. Alrededor de 1985, todo tipo de productos básicos, excepto cereales, aceites, televisores, bicicletas, lavadoras y otros productos básicos, estaban básicamente abiertos a la oferta. No fue hasta 1993 que los cupones de alimentos terminaron oficialmente y este período de suministro basado en billetes, la "era de los billetes", llegó a su fin.