Una momia que había estado congelada durante miles de años fue descubierta en un glaciar de Austria. Los científicos han determinado que tiene más de 5.000 años y que la momia también tenía orejas perforadas. Cuenta la leyenda que el origen del piercing en la oreja puede estar relacionado con la "magia". Muchas tribus primitivas creían que el diablo podía entrar al cuerpo a través de los oídos y que el metal era un guardián eficaz contra demonios y fantasmas, lo que llevó a la creación de piercings y al uso de joyas de metal.
El arte del piercing corporal se hizo popular en todo el mundo gracias al "punk" británico en los años 70 y al "Hip" americano al mismo tiempo. A los hippies y punks de aquella época les gustaba tener el pelo largo, turbantes indios, vaqueros, camisas indias y collares hechos a mano o joyas de metal. Los defensores del movimiento propusieron lemas antiarte, antirracional, antilógica, antitotalitaria y anticapitalismo para expresar la insatisfacción de los adolescentes de clase trabajadora con la sociedad y protestar contra la realidad. No tienen sugerencias, sólo destrucción; intentan demostrar plenamente su traición negando, destruyendo y destruyendo todos los valores. Además de la música rock, los tatuajes y los graffitis, las perforaciones corporales se convirtieron en otra forma importante para que los jóvenes expresaran su personalidad en ese momento.