Pero ¿por qué los consumidores están dispuestos a comprar cerca en lugar de acudir a muchas tiendas o a tiendas lejanas? Esta no es sólo una cuestión teórica, sino también una cuestión operativa de qué deberían hacer las tiendas de conveniencia. Responder a esta pregunta implica tomar decisiones sobre a qué clientes se dirige la tienda de conveniencia, qué productos vender, dónde venderlos y cómo estimular el deseo de compra de los clientes. Cuestiones relacionadas requieren un estudio más riguroso.
Pero una cosa debe quedar clara: los consumidores tienen "necesidades de comodidad". Esta es una necesidad recurrente del consumidor, con emociones impulsivas y decisiones o acuerdos simples. Los consumidores ya saben cuáles son los productos básicos que satisfacen estas necesidades, conocen su valor y están acostumbrados a compras rápidas y consumo inmediato. Como se mencionó anteriormente, el comportamiento de los estudiantes de primaria a la hora de comprar refrigerios es casi universal. Su demanda de refrigerios puede no ser una función de un "reflejo condicionado", sino una "necesidad natural" determinada por factores fisiológicos. Aunque el proceso de compra de los alumnos de primaria también puede incluir un proceso de selección, es básicamente un tipo de toma de decisiones simple, la velocidad de la toma de decisiones es tan rápida que puede considerarse como una toma de decisiones sin pensar.