1. La felicidad promueve la educación de la autoexperiencia: las emociones positivas y las experiencias placenteras obtenidas en actividades grupales ayudan a los individuos a explorar y desarrollarse. Al interactuar con otros, cooperar con otros y enfrentar desafíos, cuando las personas estén satisfechas con su éxito y sentido de logro, comprenderán mejor sus propias habilidades, pasatiempos y valores, y también tendrán más claridad acerca de sus objetivos personales. metas y objetivos.
2. La educación para la experiencia personal promueve la integración en la felicidad colectiva: a través de la autoconciencia y el crecimiento, los individuos pueden comprender y aceptar mejor a los demás. Esta actitud inclusiva les permite construir buenas relaciones dentro de un equipo o comunidad y disfrutar de la amistad, el sentido de pertenencia y la alegría de lograr objetivos juntos.