Método 1: Da el ejemplo correcto a tus hijos.
Los padres son los mejores maestros de sus hijos. El comportamiento de los padres es lo que imitan los niños. El propio comportamiento de los padres es importante para dar ejemplo a sus hijos.
Si los padres se adhieren a los principios y prestan atención a la autodisciplina en la vida diaria y la reflejan en sus acciones, darán un buen ejemplo a sus hijos. Por otro lado, si los padres están de mal humor y hacen lo que quieren sin tener en cuenta las consecuencias, sus hijos aprenderán el mismo estilo de comportamiento.
Método 2: Guiar a los niños para que aprendan el autocontrol y la autorregulación.
En la infancia, los niños no tienen ninguna capacidad de autocontrol y adaptación. Están completamente afectados por impulsos y deseos, y les resulta difícil hacer una cosa durante mucho tiempo.
En la infancia, los niños desarrollan gradualmente la capacidad de autodisciplina. En este momento, padres y profesores deben prestar atención a ayudar y orientar a sus hijos. Por ejemplo, si a los niños les gusta comer dulces, algunos padres esconderán los chocolates y tratarán de que los niños no los encuentren, pero una vez que los niños se enteren, es posible que se los coman todos.
Si cambia el método, déle al niño diez dulces a la vez, luego dígale las desventajas de comer demasiada azúcar y hable con él para que coma solo dos dulces al día. Si el niño está de acuerdo, pídale que siga las reglas. Al principio, es posible que los niños no puedan hacer lo prescrito o hacerlo peor, pero como padre, debe tener paciencia, en lugar de reprender, y animar a sus hijos a que sigan trabajando duro. Conforme pase el tiempo, el niño marcará la diferencia.
Un ejemplo muy clásico de educación es que los padres les dicen a sus hijos de antemano: "Hay azúcar en la mesa. Puedes elegir comerla o no. Si puedes insistir en comerla hasta la tarde, habrá más azúcar. De esta manera, los niños pueden experimentar el sentimiento de tentación a su alrededor y los logros psicológicos después de superar la tentación.