Durante el proceso de examen, muchos estudiantes harán trampa para obtener puntuaciones satisfactorias. Sin embargo, en algunos exámenes formales, si los candidatos hacen trampa, se enfrentarán a sanciones graves, como la revocación de sus puntuaciones o no permitir que los candidatos realicen dichos exámenes en los últimos años. Este método también sirve para mantener la imparcialidad del examen, porque los estudiantes solo pueden destacar si aprueban el examen. En este entorno competitivo, sólo mediante una selección capa por capa se pueden encontrar talentos destacados. Si se hace trampa durante el examen, no sólo es injusto para los demás candidatos, sino que también contiene mucha humedad.
Ante las trampas en los exámenes, las escuelas deberían incrementar sus esfuerzos para castigar severamente a los estudiantes. Si los estudiantes realizan exámenes o pruebas finales en la escuela, deben ser conscientes de los peligros de hacer trampa. Una vez que los estudiantes hacen trampa, deben ser severamente castigados. También deben aumentarse las penas para algunas personas que se presentan a los exámenes de selección social. Ante una contratación injusta, deben denunciar las denuncias. Durante el examen, nunca mires las preguntas de otras personas ni elijas hacer trampa para obtener buenas calificaciones.