1. Incluir las escuelas privadas en el ámbito de regulación y gestión de las políticas públicas favorece la asignación equilibrada y el flujo razonable de recursos educativos y previene el fenómeno de "una escuela dominante" y el "monopolio de marca".
2. En la actualidad, las asignaturas de la escuela privada presentan características complejas y diversas. La transformación del carácter público favorece la solución del problema de legitimidad de las asignaturas escolares, endereza las relaciones de gestión administrativa y promueve el desarrollo equilibrado de la obligatoriedad. educación.
3. Las escuelas privadas disfrutan de apoyo financiero estatal después de la transformación. A través de la política de educación obligatoria gratuita, la coordinación de los maestros y la gestión unificada, es propicio para ampliar las calificaciones de admisión de los niños y hacer realidad el derecho de los niños a una educación de alta calidad.