Desde finales de mayo hasta principios de junio de 2007, se produjo un incidente de cianobacterias que contaminaron las fuentes de agua potable en el lago Taihu en Wuxi, Jiangsu, que conmocionó a China y al mundo. La ciudad de Wuxi quedó contaminada y el suministro de agua doméstica de 2 millones de personas se vio afectado, lo que provocó un grave impacto social. Principalmente debido a la gran acumulación de cianobacterias cerca de las fuentes de agua, durante la descomposición anaeróbica se produce una gran cantidad de sustancias olorosas como NH3, mercaptanos, tioéteres y sulfuro de hidrógeno.