1. Prestar atención a cultivar la conciencia de igualdad de los niños. En las familias occidentales, todo tipo de juguetes y libros infantiles se colocan al alcance de los niños, y las paredes y puertas están cubiertas con "obras artísticas" de los niños; los padres rara vez respetan las palabras y los hechos de sus hijos. Es natural que los niños llamen a sus mayores por su nombre, al igual que a sus compañeros. Los padres siempre se ponen en cuclillas cuando hablan con sus hijos.
2. Preste atención a cultivar la capacidad práctica de los niños. Cuando los padres vean a sus hijos garabatear en la pared, morder juguetes, usar tijeras para cortar libros, ropa y otros artículos, no se arrepentirán de que algo se haya roto, pero se alegrarán y luego explicarán pacientemente algunas operaciones a sus hijos. Porque piensan que es porque el niño ha aprendido algunas habilidades.
3. Preste atención a cultivar la capacidad independiente de los niños. En Occidente, los padres cultivan el sentido de independencia de sus hijos desde una edad temprana. Los niños duermen en camas pequeñas cuando son pequeños y tienen habitaciones separadas cuando son mayores. En los asuntos diarios, los padres solo ayudan a sus hijos a hacer cosas que ellos no pueden hacer a esa edad y tratan de hacer todo lo que sus hijos pueden hacer por sí mismos.
4. Presta atención a cultivar la creatividad de los niños. Las escuelas primarias nunca inculcan una gran cantidad de conocimientos a los niños en el aula, sino que hacen todo lo posible para dirigir su atención al océano ilimitado de conocimientos fuera del campus. No exigen que los niños memoricen muchas fórmulas y teoremas, sino que los toman; la molestia de decirles cómo pensar. Nunca utilizan exámenes para clasificar a los estudiantes en tercer o sexto grado. En cambio, hacen todo lo posible para afirmar todos los esfuerzos de los niños y elogiar todas las conclusiones que los niños sacan a través del pensamiento.