La forma en que los padres occidentales educan a sus hijos.

Hay seis diferencias entre los padres chinos y occidentales a la hora de educar a sus hijos.

(1) Prestar atención a los comportamientos y hábitos de la vida diaria

●Padres occidentales: enséñales diariamente desde la infancia.

Los padres occidentales conceden gran importancia a educar a sus hijos sobre los comportamientos y emociones diarios, el respeto a los demás desde el corazón y el cultivo de comportamientos y hábitos diarios.

●Padres chinos: Ignorando la "educación para ser un ser humano"

Sin embargo, los padres y maestros de jardín de infantes de nuestro país a menudo están divorciados de la realidad del desarrollo psicológico de los niños. Por ejemplo, en los jardines de infancia proponen educación sobre el patriotismo, el heroísmo revolucionario y el gran idealismo, pero ignoran hábitos básicos de comportamiento y buenas interacciones interpersonales, que son adecuados para las etapas de desarrollo de los niños.

Hemos estado hablando de educación paso a paso, que no sólo es aplicable a la educación intelectual y la educación del conocimiento, sino también a la educación moral en la vida y el trabajo. En la actualidad, nuestros hijos tienen conceptos morales indiferentes y un desarrollo social deficiente. Esto no es ajeno al hecho de que los padres descuidan la "educación para la vida" más básica de sus hijos.

Deje que sus hijos aprendan a ser independientes

●Padres occidentales: dejen que sus hijos aprendan a ser independientes por sí solos.

Los padres occidentales generalmente creen que los niños tienen la capacidad de autorreflexionar y educarse. Los niños deben trabajar duro, vivir solos, ser felices con el trabajo duro, adquirir diversos conocimientos y aprender diversas habilidades mediante actividades prácticas. Permitir que los niños hagan lo que pueden hacer es una señal de respeto hacia el niño.

Por ejemplo, en Occidente se dan muchas situaciones como ésta: el padre o la madre camina delante, y el niño que acaba de aprender a caminar lo sigue detrás. Creen que es muy importante cultivar la independencia de los niños.

●Padres chinos: proteger los distintos niveles de cariño.

Los padres chinos temen que sus hijos choquen entre sí, por lo que a menudo los abrazan o tiran de ellos.

(3) Dejar que los niños se desarrollen naturalmente

●Padres occidentales: Dejar que los niños se desarrollen libremente.

Los occidentales tienen un deseo relativamente débil de que sus hijos se hagan famosos y formen una familia. No diseñan minuciosamente el futuro de sus hijos, sino que prestan atención al libre desarrollo de sus hijos y se esfuerzan por convertirlos en seres sociales que puedan adaptarse a diversos entornos y tengan la capacidad de sobrevivir de forma independiente. Su educación familiar se basa en cultivar el espíritu pionero de los niños y convertirlos en personas autosuficientes.

Basándose en este concepto, muchas familias de los países occidentales conceden gran importancia a la autoformación de sus hijos desde una edad temprana. Generalmente creen que los niños deben confiar en su propia fuerza para su crecimiento, por lo que deben cultivar y ejercitar la autosuficiencia y las habilidades de vida independiente de sus hijos desde una edad temprana.

Por ejemplo, hacer que los niños conozcan el valor del trabajo desde pequeños, dejar que ellos mismos reparen y monten motocicletas, y compartir el trabajo de cortar el césped, pintar casas, reparaciones sencillas de carpintería, etc. Además, tengo que salir a hacer trabajos ocasionales, empujar la cortadora de césped en verano, palear nieve en invierno y barrer hojas caídas en otoño. El trabajo que los niños occidentales han realizado desde la infancia, como repartir periódicos, es en sí mismo un entrenamiento del espíritu de trabajo duro.

En el frío invierno, cuando los niños chinos de su misma edad todavía duermen profundamente en camas calientes, los niños occidentales ya se levantan y reparten periódicos puerta a puerta.

Esto puede parecer "cruel" para los padres chinos que adoran a sus hijos, pero es esta educación aparentemente "cruel" la que crea las habilidades para la vida independiente y autosuficiente de los niños occidentales. En este sutil proceso, los niños se convierten gradualmente en ciudadanos con capacidades de supervivencia independientes y un sentido de responsabilidad social.