¿Cómo se convirtió Jaime I en heredero de Isabel I?

? La reina Isabel I fue sucedida por Jaime I, que ascendió al trono gracias al nombramiento de Isabel. La reina Isabel I de Inglaterra es hija del rey Enrique VIII de Inglaterra y el último segundo monarca de la dinastía Tudor. Se la conoce como la hermana "Bloody Mary" de María I. Después de que María I muriera de una enfermedad en 1558, Isabel I murió. en enero del año siguiente coronado oficialmente rey. Isabel I nunca se casó, por lo que fue la última monarca Tudor.

Isabel I era soltera, lo que le valió el título de “Reina Virgen” y también le trajo la molestia de elegir un heredero. Elegir al sucesor de Isabel I fue una cuestión complicada. Si bien la reina utilizó su condición de soltera para mantener su gobierno y buscar beneficios, también perdió el derecho a tener hijos y elegir a sus propios hijos para heredar el trono.

Después de miles de selecciones por parte de la Reina, finalmente se determinó que el heredero de Isabel I era Jaime I, el único hijo de María Estuardo que fue encarcelado y ejecutado por Isabel I. En ese momento, Isabel I Tenía algunos herederos más probables, como María Estuardo, la madre de Jaime I, pero sus creencias eran opuestas a las de Isabel I, y María era católica.

James I y James VI, el primero significa monarca de Inglaterra, y el segundo significa que es monarca de Escocia. Cuando James tenía un año, varios nobles poderosos lo coronaron rey de Escocia y se convirtió en James VI. No tomó el poder personalmente hasta 1583. Cuando Jaime I estaba en el poder, enfatizó el concepto de "derecho divino de los reyes". Creía que el monarca estaba sellado directamente por Dios y podía gobernar el país en nombre de Dios. Hizo hincapié en que el poder del monarca debería ser grande y que todo lo que el pueblo tenía que hacer era obedecer.

En general, la valoración del sucesor de Isabel I, Jaime I, es bastante positiva. Creía que era un gobernante ignorante en ese momento. Su comprensión del corazón de la gente y su sabiduría política fueron reconocidas por las generaciones futuras, excepto por su extravagancia y obstinación.