1. La educación rejuvenece y fortalece al país. El talento es un recurso estratégico para lograr el rejuvenecimiento nacional y ganar la iniciativa en la competencia internacional. Dar prioridad al desarrollo de la educación es una opción inevitable para que un país y una nación busquen un desarrollo a largo plazo.
2. Defender el liderazgo general del partido en materia de educación. El liderazgo general del partido en materia de educación es la garantía política fundamental para lograr el desarrollo prioritario de la educación. Al priorizar el desarrollo de la educación, los colegios y universidades deben adherirse al liderazgo general del partido y hacer nuevas y mayores contribuciones para lograr el objetivo del segundo centenario, hacer realidad el sueño chino del gran rejuvenecimiento de la nación china y promover el progreso de la civilización humana.
3. Profundizar en la reforma de la educación y la enseñanza. Para administrar bien la educación, debemos respetar nuestra propia historia y cultura y promover reformas e innovación basadas en nuestras propias condiciones reales. Para priorizar el desarrollo de la educación, debemos adherirnos al concepto de desarrollo centrado en las personas, construir un sistema educativo de alta calidad impulsado por la reforma de la evaluación educativa y promover vigorosamente el desarrollo equilibrado de la educación.
4. Implementar la tarea fundamental de construir la integridad moral de la gente común. A quién formar, cómo formar y para quién son las cuestiones fundamentales de la educación. La base de la educación de las personas reside en la moralidad, y las universidades deberían hacer del fortalecimiento de la educación en valores el contenido central de la educación.
5. Reunir los esfuerzos conjuntos de toda la sociedad. Docentes de alta calidad y una inversión sostenida y estable en educación son requisitos previos importantes para apoyar el desarrollo prioritario de la educación. Para adherirnos al desarrollo prioritario de la educación, debemos promover vigorosamente la costumbre social de respetar a los docentes y valorar la educación, y mejorar integralmente el estatus social y las garantías de remuneración de los docentes.