Una experiencia de montaña rusa
Cuando las emociones de los padres fluctúan, el corazón de sus hijos también fluctúa, como si estuvieran en una montaña rusa emocional. Esta inestabilidad no sólo hace que los niños se sientan inseguros y tengan baja autoestima, sino que también puede afectar su salud mental.
Padres y profesores trabajan juntos.
La educación familiar y la orientación de los padres son muy importantes para el desarrollo del carácter de los niños. Sólo cuando padres y maestros trabajen juntos podremos crear un mejor entorno para que los niños crezcan.
Comprender los ciclos del estado de ánimo
Comprender los ciclos del estado de ánimo puede ayudarnos a afrontar mejor la inestabilidad emocional de nuestros padres. Durante estas fases podemos intentar aliviar el estrés y mantener la calma comiendo postre, haciendo yoga o haciendo ejercicio.
Trata a tus hijos con amor.
Cuando tengamos una interpretación negativa del comportamiento de un niño, intentar verlo desde otra perspectiva con amor. Por ejemplo, si un niño accidentalmente tira una taza, primero podemos preocuparnos de si está herido y luego recordarle que tenga cuidado la próxima vez.
Reflexionar y comunicar con prontitud
Cuando los padres cometemos errores y perdemos el control de nuestras emociones y nos desquitamos con nuestros hijos, debemos comunicarnos y disculparnos oportunamente después. Que los niños sientan nuestro cuidado y disculpa, para que puedan crecer mejor.
La educación del amor impregna cada familia.
Espero que todos los niños puedan ser tratados con amabilidad y que todos los padres puedan ser una guía hacia la estabilidad emocional. Que la educación del amor llene a cada familia y siente una base sólida para el futuro del niño.