Te considero mi vida.

En esta vida uno puede experimentar el esplendor y toda la belleza del mundo flotante, pero a veces parece un sueño.

En este mundo materialista, debe haber una persona adecuada que sepa apreciarte y cuidarte, que esté dispuesta a sostenerte en la palma de su mano y cuidarte como a su propia vida.

Esta emoción fue un poco de vicisitudes al principio, pero al final tuvo una pequeña y hermosa felicidad. Después de sentir la prosperidad en la superficie, sentí la pertenencia más pacífica en mi corazón.