Un problema real: cuanto mayores son los ingresos, más familias quieren mantener su ventaja de clase mediante la educación de sus hijos. A medida que inviertan más en educación, la clase general les seguirá. Si no hacen un seguimiento, significa que la brecha seguirá ampliándose a partir de la próxima generación, y la tasa de crecimiento ampliará la distancia. Los sueños de la gente común de mejorar el estatus social de su familia a través de las calificaciones académicas de sus hijos están destinados a evaporarse.
La tutoría es una estrategia de cada familia para mejorar la competitividad de sus hijos, pero ya sea por motivos de rendimiento académico o gustos y estilo de vida, los diferentes niveles culturales y económicos tienen diferentes opciones. En el pasado, no había ningún llamado a una educación de calidad, y la educación de calidad brindada a los niños por familias de altos ingresos no era diferente de la actual, incluyendo cursos académicos y formación artística. Cuanto más alto es el estatus social y económico de la familia, mayor es el gasto en educación y más diversas y de alto nivel son las formas y niveles de educación que reciben los niños.
En primer lugar, han aumentado los niveles de ingresos familiares, que es la base material.
En segundo lugar, la competencia académica cada vez más feroz y el efecto Matthew de los recursos educativos obligan a las familias a invertir más capital en sus hijos.
En tercer lugar, el nivel educativo de los padres ha mejorado y su concepto de educación familiar ha aumentado. Los padres con niveles educativos más altos tienen mayores expectativas sobre la educación de sus hijos.
En cuarto lugar, el efecto grupal del deseo de los estudiantes de desarrollar intereses y mejorar su propia calidad cultural.
En quinto lugar, la presión de grupo afecta tanto a los padres como a los niños.