Primero, fortalecer la publicidad y la educación. A través del equipo de trabajo de la aldea y los cuadros de la aldea responsables del trabajo, educamos uno por uno a los hogares en peligro de ser renovados, explicamos a la sociedad y a las familias las graves consecuencias de los accidentes de seguridad en la producción y mantenemos las alarmas sonando.
El segundo es intensificar las inspecciones. Organizar grupos y comités de aldea para realizar una inspección exhaustiva de los agricultores que están construyendo casas en las diferentes etapas del comité de aldea. Si se encuentra algún peligro para la seguridad, el trabajo se detendrá inmediatamente para su rectificación; de lo contrario, no se permitirá ninguna construcción.
El tercero es establecer un sistema de rendición de cuentas. Los principales líderes del municipio, los líderes a cargo, el equipo de trabajo de la aldea y el comité de la aldea firmaron una carta de responsabilidad conjunta de cuatro niveles, y los agricultores que implementaron el peligroso proyecto de renovación emitieron una carta de compromiso para una construcción y producción seguras.