Después de fundar su primera empresa en 1968, Philips Starck creó una empresa que lleva su nombre en 1979. En 1982, el presidente francés Mitterrand le encargó que diseñara la residencia privada del Palacio del Elíseo, que le hizo famoso de un solo golpe. Más tarde, transformó el Café Cstes en Le Café, transformó el Royalton Paramount de Nueva York en un clásico en el New World Hotel y creó muchas obras maestras arquitectónicas en Japón. La decoración del The Peninsula Hotel en Hong Kong muestra su impacto en el espíritu tradicional, haciendo que la gente recuerde fácilmente su temperamento único. El Teatron en México, el Hotel Delano en Miami; el Mondrian en Los Ángeles; y el Hotel Asia de Cuba en Nueva York.
Su energía no se limita a esto. Su fantasía se extendió a todo, desde muebles hasta ratones, desde relojes Rossini hasta sillas de ruedas. Al diseñar Benetou, capturó la esencia del océano. Convierte los cepillos de dientes en objetos nobles; exprime limones de la manera "incorrecta"; y llena nuestros televisores de interés mientras infunde su "estilo emocional" en el mundo electrónico de Thomson. Incluso se tomó el tiempo para reemplazar los macarrones, ceniceros, lámparas, cepillos de dientes, picaportes, cuchillos, candelabros, teteras, jarrones, relojes, scooters, motocicletas, escritorios, camas, grifos, bañeras e inodoros que comíamos. En definitiva, nos cambió la vida...