El coste total se refiere al importe total de las deducciones. Gastos totales = parte de la remuneración laboral en el ingreso total × 0,2, es decir, el 20% de la remuneración laboral está libre de impuestos y se deducirá al calcular el IRPF.
Los gastos se refieren a la salida total de beneficios económicos que se producen en las actividades diarias de una empresa y no están relacionados con la distribución de ganancias a los propietarios, lo que conducirá a una reducción del patrimonio neto.