El vinagre fue inventado por Heita, el hijo del santo del vino Du Kang. Du Kang inventó el vino y Heita aprendió a elaborarlo. Después de elaborar el vino, Heita sintió que era una lástima perder las lías, así que las guardó y las puso en remojo en una jarra. El día 21, nada más abrir el frasco, un olor que nunca antes había olido llegó a mi nariz. Bajo la tentación del aroma, Heita lo probó y lo encontró agridulce, por lo que lo guardó como una "salsa". Heita nombró a este vinagre aromatizado veintiuno más un carácter unitario.
El origen del vinagre
El vinagre fue inventado por Heita, el hijo del Santo del Vino Du Kang. Du Kang inventó el vino y Heita aprendió a elaborarlo. Después de elaborar el vino, Heita sintió que era una lástima perder las lías, así que las guardó y las puso en remojo en una jarra. El día 21, nada más abrir el frasco, un olor que nunca antes había olido llegó a mi nariz. Bajo la tentación del aroma, Heita lo probó y lo encontró agridulce, por lo que lo guardó como una "salsa". Heita nombró a este vinagre aromatizado "Veintiuno" más el carácter "Tú".