Algunas personas tocan en el pasillo, otras tocan en la sala del piano y otras tocan vídeos con sus teléfonos móviles.
Había mucho ruido abajo y los estudiantes de primer y segundo grado de la escuela secundaria se apresuraron escaleras abajo. "Blooming Life" de Wang Feng volvió a resonar en varios edificios de enseñanza.
Recuerdo que cuando estaba en segundo grado, miraba con envidia la mesa de ping-pong en el Edificio B del quinto piso.
Recordé una noche de invierno en la que mis compañeros y yo subimos al quinto piso para buscar libros y accidentalmente vimos el brillante cielo nocturno de invierno.
Recuerdo aquel sofocante comienzo de verano, aquella noche en la que llovía mucho, disfruté por primera vez de un paraguas con un chico y caminé a casa para charlar.
Recordé la escena de ese mismo verano en la que el profesor lloró en el podio con las lágrimas corriendo por su rostro durante veinte minutos, y los sollozos incontrolables de sus compañeros.
Pensé en el cielo sombrío fuera de la ventana y en las hojas de bambú que danzaban salvajemente, y en el crujido que hacían cuando se golpeaban durante el examen en el segundo piso del Edificio B.
Pienso en el profesor de matemáticas que nos enseñó durante un semestre. Toda la clase quedó asombrada por su demostración de francés en el podio.
Recordé la escena de toda la clase ensayando con trajes antiguos en la azotea del quinto piso. La trompeta del director es realmente poderosa. Durante el descanso entre ensayos y ensayos, la mayoría de la gente disfrutaba del frescor en las sombras, con solo unas pocas flores exóticas saltando afuera.
Recuerdo la última vez que despedí a mis mayores. Llovió intermitentemente varias veces y casi todos se mojaron.
Recuerdo los aplausos que resonaron en el estadio. Algunas personas dicen que ya casi he llegado, yo digo que todavía estoy muy atrás.
Recuerdo la primera vez que entré al aula. Leí en silencio el divertido mensaje firmado varias veces y me reí mientras lo leía.
Pienso en un examen. Escribí en una hoja de papel delgada, la doblé formando un rectángulo todavía delgado y la metí poco a poco en el espacio entre la pizarra y la pared.
Recuerdo los graffitis que algunos compañeros escribieron en la pizarra después del tifón. Todos se quejaron de las cortas vacaciones del tifón.
Pienso en muchos recuerdos, pienso en cosas triviales que olvidé antes, pienso en cosas que ya no puedo recordar, pienso en eventos que todos conocen.
Recuerdo...
Toco el túnel de la memoria con mi mano derecha, dibujo contornos inolvidables con lápiz, escribo fuentes cuadradas con ambas manos para registrar el pasado y el presente. , Utilizo mis cuerdas vocales. Cada vibración canta o cuenta una hermosa historia.
Pero ninguno de estos puede describir el futuro.
Ese futuro hermoso, desconocido, aterrador, lloroso.
Caminé hacia allí con cautela, con curiosidad y resistencia en mi corazón, pero el tiempo es un poderoso promotor, empujándome hasta el final paso a paso.
Estoy en una prisión profunda...
Escrito antes, ahora publicado...