Los padres saben claramente cuándo jugar con el móvil. Como primeros tutores de los estudiantes, los padres no sólo deben cuidar de la alimentación, la seguridad y la salud de sus hijos, sino que también son sus primeros maestros. Tienen la responsabilidad y la obligación de guiar a los estudiantes para corregir los valores de la vida, saber qué hacer a esta edad y el impacto a largo plazo en sus vidas futuras. Los juegos en línea son muy comunes ahora y los estudiantes representan una gran proporción. Cualquiera que sepa un poco de informática puede jugarlo, y la mayoría de ellos son autodidactas. Los padres deben informar a los estudiantes.
Pero sólo bajo la premisa de aliviar la presión del estudio, los juegos en línea no deben considerarse como comer y dormir, sino como algo esencial, al igual que la vida sin juegos en línea no tiene valor. En este momento, los padres deben enfatizar nuevamente que los estudiantes de todos los niveles y de diversos casos de la vida deben saber que, además de los juegos en línea, hay muchas otras cosas interesantes y significativas en la vida. Los padres también pueden cuidar a sus hijos y socializar durante las vacaciones. Practica, practica de verdad y siente con el corazón.
Cuéntales a tus hijos que hay muchas cosas interesantes en el mundo y no te cuelgues de un árbol. Además de los juegos online, puedes llevar a tus hijos al parque de atracciones para mejorar la relación entre padres e hijos y entretener su cuerpo y su mente. Podrás dedicarte a estudiar mejor cuando regreses. Tómate un año para viajar con tus hijos y déjales ver el mundo exterior. Después de estar bien informado, es posible que puedas abrir su mundo interior y desarrollar gradualmente sus intereses y pasatiempos reales.
Participe en más actividades y ocasionalmente lleve a sus hijos a participar en actividades significativas. Por ejemplo, vaya al campo para experimentar la vida rural, deje que los niños experimenten el trabajo duro y comprendan la dificultad del trabajo de sus padres.
Otro ejemplo es llevar a los niños a participar en actividades de bienestar social, hacerles saber que hay muchas personas desafortunadas en la sociedad, comprender que sus vidas felices se ganan con esfuerzo y cambiar sus ideas. Los niños son naturalmente juguetones. Sólo con una educación y orientación correctas los niños podrán crecer mejor.