Cómo lograr la democracia en la enseñanza en el aula

La democratización de la enseñanza se refiere a encarnar el espíritu democrático en el campo de la enseñanza, crear condiciones democráticas e igualitarias y establecer una relación docente-alumno democrática e igualitaria. Utilizar métodos educativos democráticos para movilizar el entusiasmo de profesores y estudiantes, cultivar el espíritu independiente de los estudiantes y permitirles un desarrollo armonioso e integral. El núcleo de la democratización de la enseñanza es establecer una relación docente-alumno democrática, igualitaria y armoniosa para que los estudiantes puedan desarrollarse sana e integralmente. En primer lugar, la democratización de la enseñanza es una necesidad de reforma curricular

En la actualidad, la enseñanza en las escuelas primarias y secundarias aún no se ha liberado de los grilletes de la educación orientada a exámenes, y el individualismo docente sigue siendo muy prevalente. Esto da como resultado que las habilidades innovadoras de los estudiantes queden sumergidas. La democracia docente encarnada en algunas clases de competencia y clases de observación es también en gran medida una "pseudodemocracia" del desempeño docente. Una vez que sale del aula, queda sin vida. La nueva reforma curricular propone un desarrollo “orientado al estudiante, centrado en el estudiante, preocupado por y para el desarrollo de los estudiantes”, lo que requiere el establecimiento de una relación docente-alumno democrática, igualitaria y armoniosa. En la enseñanza se forma una "comunidad de aprendizaje" de diálogo igualitario y de enseñanza y aprendizaje mutuos. El proceso de enseñanza ya no es una "cadena de montaje" unilateral y una "trampa" para los profesores, sino un proceso creativo dinámico, en constante mejora y personalizado. Belinsky creía que "el propósito de la educación es la naturaleza humana". Creemos que la enseñanza en el aula es una forma única de comunicación interpersonal y debe encarnar plenamente un pensamiento humanista. Desde esta perspectiva, la democratización de la enseñanza es un requisito para la humanización de la educación.

En segundo lugar, la democratización de la enseñanza es una necesidad para el desarrollo docente.

La clave para la democratización de la enseñanza es crear un ambiente de aprendizaje armonioso y relajado y centrarse en cultivar los intereses de aprendizaje y la innovación de los estudiantes. Habilidades: Se requiere que los docentes establezcan un concepto educativo abierto, diverso e innovador para estimular la sed de conocimiento de los estudiantes. El posicionamiento de los docentes también debe cambiar, lo que se refleja en la cooperación y la dedicación. En la enseñanza, los docentes deben compartir experiencias, intercambiar sentimientos e innovar constantemente con los estudiantes, de manera de llegar a consensos, compartir y avanzar juntos, formando una verdadera "comunidad de aprendizaje" y aprendiendo unos de otros en la enseñanza.

En tercer lugar, la democratización de la enseñanza es una necesidad para el crecimiento de los estudiantes.

Los adolescentes contemporáneos tienen un fuerte sentido de la democracia. Odian los métodos educativos simples y toscos y anhelan una atmósfera de aprendizaje democrática y armoniosa. Tao Xingzhi dijo: "Mil religiones enseñan a la gente a buscar la verdad; aprenden miles de cosas y aprenden a ser un ser humano". El proceso de búsqueda de la democracia es el proceso de aprender a ser un ser humano. sus vidas. Sólo así podremos promover nuestra individualidad y cultivar talentos.

Entonces, ¿cómo podemos lograr la democratización de la enseñanza en el aula?

1. La democratización de la enseñanza se refleja en la relación armoniosa entre profesores y alumnos.

La educación moderna necesita construir una relación armoniosa profesor-alumno, lo que requiere el apoyo de emociones, creencias, comportamientos y valores. Las personas que carecen de la idea de democracia en su corazón tienden a obsesionarse con sus propios juicios de valor, ignorar las percepciones de los demás e incluso frustrar las relaciones interpersonales armoniosas. Por lo tanto, desde la perspectiva de un docente, una relación armoniosa entre docente y alumno debe requerir que los docentes tengan ideas democráticas.

2. Las relaciones armoniosas en el aula reflejan la democratización de la enseñanza.

La enseñanza en el aula no es sólo un proceso cognitivo para los estudiantes, sino también un proceso de actividades de pensamiento. Se requiere que los estudiantes diseñen y gestionen activamente su propio aprendizaje, y exploren e innoven activamente. Esto también requiere que los profesores coloquen a los estudiantes en una posición dominante y se conviertan en los dueños del aula. La "orientación" del maestro se refleja en la orientación de los conocimientos, reglas, métodos, habilidades y emociones de los estudiantes. Profesores y estudiantes buscan conocimiento e innovan en la misma línea de partida, discuten temas con los estudiantes, comparten recursos y resultados y, en última instancia, logran un crecimiento común.

La práctica ha demostrado que el mejor efecto de la enseñanza es la cristalización de la sabiduría de ambas partes. Las creaciones docentes inesperadas provienen en su mayoría de la integración de profesores y estudiantes. En una atmósfera armoniosa en el aula, los maestros respetan a los estudiantes, mantienen la individualidad de los estudiantes y movilizan el entusiasmo de los estudiantes, lo que conduce a cultivar la capacidad de pensamiento integral de los estudiantes, mejorar la conciencia democrática de los estudiantes, cultivar el respeto de los estudiantes por los demás y, en última instancia, lograr los objetivos de los estudiantes. desarrollo integral.