¿Qué impacto puede tener la evasión fiscal y la planificación fiscal en las empresas?

1. Reducir los riesgos fiscales. La planificación fiscal es el acto de reducir las cargas fiscales mediante acuerdos razonables para financiar actividades, actividades de inversión y actividades operativas sin violar las leyes fiscales. La evasión fiscal consiste obviamente en evitar cargas fiscales mediante actividades ilegales, lo cual es un concepto completamente diferente. La existencia y el desarrollo de la planificación fiscal proporciona canales legales para que los contribuyentes ahorren gastos tributarios y favorece el aumento de la renta disponible de las empresas, lo que reduce objetivamente la posibilidad de infracciones del impuesto de sociedades.

2. Ahorre costes y maximice beneficios. Las empresas logran el objetivo de reducir las cargas tributarias dentro del ámbito legal organizando las actividades económicas por adelantado. No sólo asumen la obligación de pagar impuestos, sino que también reducen los costos operativos de la empresa y brindan garantía financiera para que las empresas sigan expandiendo la reproducción. El beneficio de una empresa es igual a los ingresos menos los costos y gastos, y los impuestos, como resta de los ingresos, desempeñan un papel crucial para lograr el objetivo de maximizar los beneficios.

3. Potenciar la competitividad de las empresas. Como área importante de la gestión financiera corporativa, la planificación fiscal tiene como objetivo maximizar los intereses generales de la empresa. Para lograr el propósito del ahorro fiscal legal, las empresas deben depender del fortalecimiento de su propia gestión empresarial, contabilidad financiera y gestión financiera. De esta manera se puede lograr la planificación. El plan se realiza mejor, por lo que la planificación fiscal favorece la promoción de empresas para fortalecer la gestión empresarial. Los impuestos también desempeñan un papel en la toma de decisiones corporativas.

4. Optimizar la estructura industrial de las empresas. Las empresas toman decisiones de inversión, transforman los sistemas corporativos, ajustan las estructuras industriales, etc. sobre la base de diversas políticas fiscales preferenciales. Aunque subjetivamente se trata de reducir la carga fiscal, objetivamente se está optimizando gradualmente bajo la acción de la palanca económica de los impuestos nacionales. a la distribución racional de la estructura industrial y la productividad.