Esta pregunta pertenece a la pregunta del examen de ingreso a la universidad de 2013 "Los lectores son personas felices". La respuesta es la siguiente:
Este párrafo utiliza ejemplos para respaldar argumentos fácticos. El famoso dicho de Descartes demuestra que "la lectura hace que la gente haga el bien"; el famoso dicho de Hugo demuestra que "la lectura hace que la gente evite el mal". El método de argumentación es la argumentación lógica.
Además, las personas con capacidad de leer pueden comprender un mundo más vasto y rico más allá del mundo real; pueden comprender experiencias y vivencias fuera de ellos mismos (las infinitas posibilidades más allá de la vida limitada). Las personas que han perdido la capacidad de leer no pueden tenerla. Ésta es la "desigualdad espiritual" que menciona el artículo.
Información ampliada:
Un erudito es una persona feliz en el mundo, porque además del mundo real, también tiene otro mundo más vasto y rico. El mundo real está disponible para todos, pero este último mundo es exclusivo de los académicos. A partir de esto pensé en lo desafortunados que son aquellos que han perdido o no saben leer, y su pérdida es irreparable.
Hay muchas desigualdades en el mundo, incluida la desigualdad de riqueza y la desigualdad de poder, pero la posesión o pérdida de la capacidad de lectura se refleja en la desigualdad espiritual. En la vida de una persona, sólo puede experimentar la alegría y el sufrimiento que tiene, quizás además de algunas experiencias y experiencias fuera de sí mismo de las que ha oído hablar personalmente.
Sin embargo, a través de la lectura, las personas pueden adentrarse en mundos de muchos otros en diferentes tiempos y espacios. De esta manera, las personas con la capacidad de leer de forma invisible obtienen posibilidades ilimitadas más allá de la vida limitada. La lectura no sólo le permitió aprender más sobre los nombres de plantas, árboles, insectos y peces, sino que también le permitió retroceder a la antigüedad y al futuro, y disfrutar de las extrañas costumbres de la existencia y la no existencia.
Más importante aún, la lectura beneficia a las personas no sólo al aumentar su conocimiento, sino también mediante la influencia y el cultivo espiritual. La gente aprende cómo comportarse leyendo y aprende su personalidad de los escritos de filósofos antiguos y talentos contemporáneos.